sábado, 29 de agosto de 2015

"El pajarico"

Hace un tiempo tuve la fortuna de trabajar en un centro ocupacional para personas con discapacidad intelectual y trastornos severos de conducta. Mi experiencia allí fue enriquecedora en todos los sentidos. Supe de la gratitud de unas personas cuyo amor incondicional, si, has leído bien, incondicional, estaba allí, dispuesto  a quien tuviese la valentía de querer tomarlo.
La historia que os voy a relatar a continuación es el pasaje de una de aquellas vidas que, por imposibles que os pueda parecer, sucedió y de la que no fui testigo.
Todos allí le  apodaban “el pajarico”.  Un chico de no más de veinte años,  ligero como una pluma, que pasaba todo el día moviéndose de un lado a otro por la sala, colgándose en cualquier mueble como un jilguero se cuelga de una rama oportuna.  Siempre ataviado con un traje a modo de mono completo que los auxiliares le colocaban del revés  para que no pudiera desabrocharlo, pues, si tenía la ocasión, se desnudaba en medio de la sala, dejando al aire todos sus huesos y su poca carne. Enfundado en sus manos, unos guantes  para que no arañase ya que  tenía la afición de dejar marcado el rostro de quien se tropezase en su camino...

martes, 25 de agosto de 2015

El molesto paso del tiempo

Hace dos años una noticia recorrió el mundo entero cuando el ministro de finanzas japonés hizo unas declaraciones que al parecer causaron cierta perplejidad e indignación. El ministro en cuestión pidió a los ancianos de su país que se diesen prisa en morir para que de esta manera el estado no tuviese que pagar su atención médica. 
Estas discutidas declaraciones, ponen  sobre la mesa ese molesto afán que tienen muchas personas por envejecer con el consecuente enturbio que produce en la inestable sociedad del primer mundo y su preciado estado del bienestar.
Sin ir más lejos, en nuestro país, el presupuesto para el 2016 para el pago de pensiones, supone un total del 38´5% del total presupuestado y, a pesar de las promesas del actual gobierno de la subida de las pensiones, siempre con vista a las próximas elecciones, todo apunta a que para los próximos años el gobierno de turno, tendrá que afrontar una bajada espectacular de dicha pensiones y, cuyos beneficiarios más directos, serán bancos y aseguradoras que verán engrosar sus beneficios con los seguros privados...

martes, 4 de agosto de 2015

psicólogo villalba, presentación

Hola, mi nombre es Jose Antonio y si has entrado en mi página es porque probablemente estés buscando ayuda psicológica.

Entiendo que en este momento te encuentres con diversos pensamientos enfrentados, al fin y al cabo buscar ayuda de otra persona, a menudo, conlleva sentimientos de desconfianza y cierto temor.

Pero, ¿sabes?, por si te puede ayudar, no conozco a ninguna persona que haya comenzado un proceso terapéutico y su vida no haya cambiado, y no digo que esas personas sean más felices, que también puede darse el caso, ni tampoco que la vida pase a tener un color especial, al final la vida sigue teniendo ese tinte claro oscuro, del que ineludiblemente podemos escapar. Pero lo que si te puedo confirmar es que tu actitud, tu mirada ante tu vida será diferente.

Mira, yo lo veo así, la terapia es un viaje, a veces puede ser un viaje largo e interminable y en otros tan solo un corto viaje, tú decides hasta dónde quieres llegar.

Si estás dispuesto a comenzar esta travesía, yo te puedo acompañar.



Maneras de sufrir

Para Freud la necesidad del ser humano de mantener la homeostasis, es decir, un equilibrio en la energía psíquica, se ve interrumpida por el principio de realidad que obliga al sujeto a enfrentarse a la frustración de sus necesidades y lo que considera sus deseos. Así lo placentero se viviría como una disminución de un monto de tensión mientras que el sufrimiento sería un alza de dicha tensión. La dialéctica principio del placer y principio de realidad pasaría, según Freud, a ser una dialéctica de montantes de energías, es indudable que la profesión de Freud como neurólogo y su denodado esfuerzo por lograr que el psicoanálisis tuviese un lugar como ciencia, lo dispuso a intentar sustancializar  la teoría de la mente. Pero esto sería otro tema de debate...

sábado, 1 de agosto de 2015

Un caso de borderline en diferido

Nada más sentarse me soltó que se sentía prisionero de una mujer a la que no podía dejar. 

Juan era un tipo alto y fornido, pero su cabeza colgaba como si sus hombros soportasen un peso excesivo. Casi no me miró en esa primera sesión, sus ojos, hundidos, se columpiaban entre mis zapatos y los suyos, mientras me relataba su historia. Con voz quebrada me fue desgranando, sin yo apenas intervenir, el calvario que, según él, estaba pasando.
Hacía apenas un año que conoció a una chica por Internet. Como era oficial de marina, pasaba muchas horas dentro del buque donde estaba destinado. Al principio fue una más de las muchas con las que chateaba e intercambiaba fotografías. Pero poco a poco su interés se centró solo en ella,  con la que hablaba hasta altas horas de la madrugada...